jueves, 2 de octubre de 2008

Aprender a estar solos para aprender a estar en pareja

Yo no te amo porque te necesito,
Te necesito porque te amo.
Con esta frase que seguro que alguien os escribió en la carpeta cuando íbais al instituto, inauguro un nuevo tema. ¿Qué es lo que nos impulsa a entablar una relación sentimental, el amor o la necesidad? Es decir ¿realmente amamos a nuestra pareja o la necesitamos para sentirnos completos? ¿seguiríamos con nuestra pareja si no la necesitáramos para nada?
Para mi, el amor no tiene nada que ver con la necesidad. Es decir, desde el momento en el que necesito estar con mi pareja, desde el momento en el que siento ansiedad si no tengo un contacto constante con él es que algo va mal. El verdadero amor nace entre dos personas que no se necesitan, que pueden vivir perfectamente el uno sin el otro pero que aún así eligen libremente compartir una parcela de sus vidas, aportarse cosas, vivir experiencias conjuntas. El verdadero amor es prescindible. Es decir, puedo estar contigo tan bien como puedo estar sin ti, pero elijo estar contigo porque eso me hace sentir aún mejor de lo que ya estoy sola.
A mis treinta y casi cuatro años me he dado cuenta de que hasta ahora he construído relaciones que no estaban cimentadas sobre un terreno sólido ya que partía de la necesidad imperiosa de ser amada. Esta necesidad me aportaba una sensación de angustia que hacía que no viera las cosas con claridad, y que sintiera una inseguridad constante, con todo lo que ello conlleva. Y claro, una tras otra, este tipo de relaciones se han acabado yendo a pique. 
Así que una vez repuesta de todo el susto y el desbarajuste que produce una ruptura (eso merece capítulo aparte), he decidido que ahora ha llegado el momento de dejar de necesitar el amor de una pareja. Es decir, de procurarme yo misma todo, o gran parte de lo que necesito a nivel afectivo, cultivando mis amistades, haciendo cosas que me hacen disfrutar, estando bien.
De momento la experiencia no podría tener mejores resultados. Poco a poco, voy descubriendo que la paz interior no depende de la pareja de uno sino de uno mismo. Y esto no significa que no quiera tener pareja. Precisamente estoy pasando esta temporada sola porque cuando llegue ese momento quiero compartir lo mejor de mi.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Esto que comentas yo lo llamo madurez.Ya lo dijo Madonna:"until I learned to love myself
I was never ever lovin' anybody else".
Un abrazo.

DiegoC

Perrilla In The Night dijo...

Pues sí, Madonna es sabia y estoy totalmente de acuerdo con el post de Intensa. Desgraciadamente, gran parte de la humanidad se mueve por intereses autodestructivos como el miedo a la soledad, mal number one del ser humano (o uno de los number ones), haciéndonos olvidar quizás el sentido más sincero y puro del amor, ya por Intensa descrito, el amor a uno mismo que todo lo arregla y te despoja de cualquier historia fea como por ejemplo la dependencia y necesidad mal entendida. Y también de acuerdo con DiegoC, el alcanzar el pensamiento escrito significa alcanzar también la madurez mental, algo que escasea en estos días... Y sin ánimo de ser derrotista, pero es que hay mucho crío y cría suelto. Y si bien es una maravilla llevar a un niño en el corazón, para ciertos asuntos no vale...

Buenos días...

Anónimo dijo...

Ya en su Arte de amar, Fromm dejaba eso bastante claro... Posteriormente, dentro del género Libro de Ayuda, se ha repetido esto, simplificándolo más o menos, pero dicho queda.

En realidad cualquier "absolutismo" conlleva una carga de insania mental, da igual que sea el amor o cualquier otra pasión... La soledad es un territorio fundamental para conocerse uno mismo...

De todas formas, no creo que esto valga para todo el mundo..., porque "el Verdadero amor" ya contiene una carga metafísica -pertenece al Mundo de las Ideas-.

Creo que es importante, fundamental lo que haces, Intensa.

En lo que no coincido, creo, contigo, es que todo sea tan sencillo... Me viene a la mente la expresión "clásica" que puso Perla en algún lugar, La Divina Proporción...

Pensándolo ahora: hay en toda esta visión una extraña mezcla de idealismo y realismo...

Anónimo dijo...

Un detalle, así, apresuradamente. Aprender a estar solos es una experiencia de autoconocimiento. Buscamos, en una primera etapa, lo que nos falta en el otro. Luego surgen los problemas, hay una crisis en la que se replantean expectativas. Esta fase de "soledad" -no hay otra forma de conocerse más que dedicando algún tiempo a esta soledad- es una estrategia para adaptarse al medio. Tratamos de aprender de la experiencia. El problema es: ¿cuándo sabes que ya estás preparada?
Lamentablemente, no hay otra endemoniada forma de comprobarlo que volver a "ponerse a prueba"... ¿Cuándo decides "probar", experimentar...? ¿Cuándo sabes si es un "experimento" o es ya "lo real"...?
Para colmo, no sólo tienes que calibrar el autoconocimiento, sino que hay otra persona en el juego...
Encima, muchas personas no cambian, no avanzan en ese proceso, no lo desean o no tienen el valor de hacerlo... y a lo peor esa persona es, justamente, tu posible pareja, incluso de la que ya te has "colgado" y, ¿está "libre", se conoce...?, ¿desea realmente conocerse...? ¿Juega en el mismo campo? Enlaza esto con aquel post de las personalidades a evitar..., enlaza esto con la realidad de las personas que somos: manipuladoras, honestas, engañosas, una mezcla de varios componentes, un cálculo de "intereses"...
La ecuación matemática que planteabas está bien, el problema es que el símbolo algebraico encierra muchas otras variables de las personas... Al igual que la física, la realidad se multiplica en infinidad de partículas y entidades... En fin, paro.

Intensa Forever dijo...

Ya lo sé... esto es pura teoría que no tiene en cuenta el millón de factores que en la práctica pueden llevar la situación hacia uno u otro lado, pero igualmente es mi teoría. Es lo que pienso cuando tengo la cabeza fría, libre de miedos e inseguridades.

Anónimo dijo...

Totalmente de acuerdo con tu post, Intensa. La verdad es que yo creo que a menudo partimos de un error de base que es pensar si queremos tener pareja o no. La pareja (el amor) surge, no hay que buscarla proactivamente. Y est'a claro que si no nos sentimos completos, jam'as podremos estarlo al lado de alguien. En fin. Ser'a que tenemos esas necesidades o que nos las crean con tantas im'agenes id'ilicas y rom'anticas...? Cu'anto dagno ha hecho la comedia rom'antica. Pero no me quiero poner en plan v'ictima, que como todo en esta vida (o casi todo), desear el amor depende s'olo de nosotros al fin y al cabo...

Besos

PD: no s'e c'omo habr'an salido los acentos pero estoy en un teclado ingl'es y mi religi'on me impide quitarlos radicalmente...